04-07-2021
Durante los últimos días de junio finalizo por completo la huelga de hambre que llevaban la mayoría de los prisioneros trasladados desde la Cárcel de Alta Seguridad a Rancagua, ingresados en el módulo 1 (los presos de Alta Seguridad) y en el módulo 2 (Los presos de máxima seguridad).
La movilización permitió algunas horas más de patio, el regularizar un régimen interno y el ingreso de forma más o menos estable de una mínima cantidad de alimento, necesario para sobrellevar la decadente dieta que imponen las concesionarias (empresas que lucran con la alimentación de las cárceles).
Aun así, existe una serie de batallas que continuarán dándose, como el completo desuso del locutorio tanto para abogados, como para la amenaza de utilizarlo en las próximas visitas. Todo con la excusa sanitaria como motor represivo.
De igual forma, sigue siendo urgente el ingreso de forma permanente y de forma estable de alimentación de afuera (considerando a compañeros veganos y las necesidades médicas), como algunas otras situaciones del régimen interno.
Hoy Rancagua sale de la cuarentena más estricta, por lo que se deberían reanudar las visitas en la cárcel.
Por su parte los compañeros que han participado en esta movilización se encuentran de buen ánimo y firmes, recibiendo el apoyo del resto de anarquistas y subversivxs de los distintos penales, Mónica Caballero y Pablo Bahamondes.
El llamado siempre es a no decaer en la solidaridad combativa con lxs compañerxs.
¡¡AISLAMIENTO ES TORTURA!!
¡¡SOLIDARIDAD CON LOS PRESOS MOVILIZADOS Y EN HUELGA DE HAMBRE!!
¡¡ABAJO LOS MUROS DE LAS PRISIONES!!